Este sábado 7 de diciembre, Tudela acogió la tercera edición de la Feria de Productos de Cofradías Gastronómicas. El patio de la sede de Bardenas Reales de Navarra, volvió a ser el lugar elegido por la Orden del Volatín para reunir a las 11 cofradías que repartieron más de 3300 pinchos y raciones. La feria, celebrada desde las 18:00, reunió a un gran número de asistentes, quienes pudieron disfrutar de la riqueza gastronómica representada por diversas cofradías de Navarra y otros puntos de la geografía española.
Pero la jornada comenzaba las 11:00 de la mañana, con la recepción y desayuno que los anfitriones ofrecieron a todos los que acudieron a la cita. Tras la ya tradicional foto en los jardines de Bardenas Reales, los asistentes se dirigieron a la sede que la Comunidad de Bardenas tiene en el centro de Aguilares, donde la ya constituida Cofradía del Cordero Bardenero ofreció una comida a todos los cofrades.
A pesar de la fría tarde que hizo, los visitantes degustaron pinchos y tapas elaborados con productos emblemáticos como el queso del Roncal (representado por la Cofradía del Queso del Roncal); el queso de Idiazabal que trajo dicha cofradía desde Ordizia; chistorra de Navarra (repartida por la Orden del Cuto Divino de Tafalla); el bonito del norte de Colindres; y el vino de Navarra. También destacaron el cardo con almendras y las alcachofas estofadas que repartió la Orden del Volatín; la muse de pochas con buñuelo de tomate de la Cofradía del Tomate Feo de Tudela; la tostada de ajo de Murchante; el relleno de Navarra que trajo desde Villava su cofradía; y el guiso de cordero bardenero, repartido en su debut la Cofradía del Cordero Bardenero. La sidra del Bidasoa completó esta muestra de sabores auténticos, que se convirtió en un auténtico viaje de sabores.
La banda sonora de la feria estuvo a cargo de MasMarcus, que aportó un ambiente festivo a una tarde marcada por el buen comer y la convivencia.
Agradecer a la Comunidad de Bardenas Reales y Fecoga por su colaboración, así como a Gvtarra y Frutas y Verduras Castel Ruiz por el patrocinio.
Este evento consolidó una vez más el papel de Tudela como punto de encuentro para la gastronomía y la cultura, mostrando el compromiso de la Orden del Volatín con la promoción de los productos locales y tradicionales.