La cocina de la Ribera Navarra está marcada por unas características climáticas especiales y por su condición de zona de paso y pervivencia de tres culturas. Este marco y el Ebro han favorecido el desarrollo de una gastronomía diferencial y diversa con especial renombre en la verdura, permitiendo degustar, en todo su valor, las típicas y autóctonas de Navarra que rozan la perfección vegetal.